Ivaginaria / Cultura fálica: Nacho Vidal

AutorElia Martínez-Rodarte

...entonces el rey Arturo bajó las escaleras haciendo explotar a los traidores con su espada Excálibur y cuando llegó a la explanada, los enemigos que lo esperaban rindieron sus fierros. El rey Arturo se retiró arrastrando la punta de su mítica arma en la tierra, sacando chispitas...

¿Qué ven ahí ustedes querido público? Yo veo un señor que bajó las escaleras con el falo desenfundado y cuando estalló en furia, salió arrastrando un pene descomunal.

Mi interpretación subliminal de esa escena tan filosa (de la película "King Arthur" de Guy Ritchie, y su versión libre sobre lo que sucede en la historia de Camelot), corresponde a una cultura muy estacionada en la falocracia, lo cual aunque suena delicioso, no lo es tanto. En especial para los hombres. Debe de ser cansado andar blandiendo la chaira para cualquier cosa.

El pene ha sido adorado desde el inicio de la humanidad como fuente creadora de malteada y de chamac@s, y esa pulsión se encuentra en nuestro organismo. No se asusten, sólo honren la tradición, pero sin que sea la religión, como lo fueron el pene y sus simbolismos para muchos pueblos antiguos. Y modernos...pero ahora no adoramos a dioses con los penes de fuera a menos que sean actores porno o chichifos de toda ocasión.

En eso estaba, pensando en el hermoso tema fálico, cuando me entero que Nacho Vidal, el actor porno de España, ha demandado a un médico colombiano al que acudió por un dolor en el oído y el doctorsucho terminó tocándole el pene. No conforme con ello, logró que se le pusiera dura al famoso pitudo.

Nacho Vidal, lo que sea de cada quien, posee una buena barra. Ahora se encuentra grabando una serie narco-porno en Colombia, entonces por ello fue a la bogotana Clínica Contry, a donde le testerearon al mostro.

Varios medios españoles y colombianos reportaron que Vidal acudió por una dolencia que no ameritaba que el médico le pidiera que se bajara los pantalones. El actor ya hasta se había tomado fotos con el doctor, pero la cosa se puso fea cuando, tras la revisión, le confirmó a Vidal que en realidad no era necesaria la basculeada.

Por supuesto que mi yo inevoluto se pregunta: ¿le habrías agarrado el trozo, Elia, si fueras la doctora? Pero he visto a Nacho Vidal dos veces en mi vida, por desgracia con ropa, y por supuesto que como cualquiera, deseaba...

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